"Bueno... si es tu primer smartphone"

Me decanté por este móvil para iniciarme en el mundillo y atraída por su reducido tamaño (no entiendo que ahora hagan los móviles tan grandes, para eso te compras una tablet) y la duración de su batería, que por aquel entonces era de lo mejorcito que había. Pero pasados un par de meses (o menos, dependiendo de lo exigente que seas y el uso que hagas de él), acabarás viendo los problemas que presenta:
- La pantalla es malísima, quizá se deba a un reducido ángulo de visión que se hace apreciable, sobretodo, al girar el móvil en horizontal. Esta pantalla hará que sea un calvario navegar por Internet y que tus ojos se lleven las consecuencias. Las letras no se leen bien y tienes que estar buscando todo el rato la “posición correcta” para mejorar un poco la imagen.
- La memoria real que tienes no es de 1GB, sino que te quedas con unos 160MB para instalar aplicaciones (una notable diferencia). Y la realidad es que existe una buena cantidad de aplicaciones que no se pueden mover a la memoria del teléfono para reducir un poco su tamaño…
- La cámara de fotos es bastante mediocre. 3Mpx deberían ser suficientes pues solo afectan al tamaño de la fotografía, sin embargo, la calidad que ofrece esta cámara es pésima. La compararé con otro teléfono que tuve (no smartphone): el Samsung GENOA (2010); y diré que no he notado ninguna diferencia más que las imágenes tienen un tamaño más grande. Apenas tienen color, nada de nitidez y a veces pienso que casi salen sobreexpuestas.
- Por otro lado, su procesador de 800MHz no siempre consigue hacer funcionar correctamente algunas aplicaciones y las más potentes irán a tirones. Claro, que como no vas a tener espacio para instalarlas, tampoco es algo de lo que uno se esté preocupando todo el día…
Lo mejor es, como ya he dicho, la batería (que aún me sigue durando dos días enteros con un uso no demasiado intensivo) y el tamaño (que se puede llevar en el bolsillo sin problemas).